Ave María GOTY Purísima.
Sin Dlc´s concebida
Perdóname Padre,
porque he pecado
Cuéntame, hijo mío
Padre, he roto el
vigésimo mandamiento Gamer
Dios… ¿has actuado en
contra de tus principios publicados en la Red?
Así es, Padre. Hace un
año publiqué en un Blog que llevo con unos amigos que odiaba Destiny. Critiqué
su conexión obligatoria, dije que nunca lo compraría…y ahora…ahora…
No llores, hijo mío.
Piensa que hay gente que ha pagado 120 euros por Battlefront…sigue…
Ahora estoy
enganchado, Padre. Desayuno y pienso en Destiny. Al almorzar veo la Coca-Cola
como un Engrama, al echarme la siesta cumplo mi contrato como Andaluz…incluso
mientras tengo encuentros sexuales con mi señora pienso en Destiny, pues pienso
en activar mi Super y…
Hijo, al grano
Perdone, Padre. Vengo
que a me perdone y me ayude a avanzar.
Por supuesto, hijo,
avanzar en la vida siempre debe de ser la mayor de nuestras metas y…
No, Padre, déjese de
vida leches. Me refiero a avanzar en una Incursión en la que estoy atrapado.
Necesito que me perdone, que se una a mi escuadra y colabore, coño
Oh…Dios mío…qué hemos
hecho mal….
Pues así es, amigos míos. Estáis probablemente ante el tío
con menos criterio después del diseñador del mando de Nintendo 64. Yo hace un
año me hacía el duro poniendo a parir a Destiny, diciéndoles a los amigos que
se lo pillaban que estaban haciendo el parguelas y que yo jamás cedería ante
las imposiciones de Bungie por su conexión obligatoria. Sin embargo, hoy, un
año después, me encuentro en un estado
de enganchamiento tan preocupante que obligo a mis padres a llamarme Guardián.
¿Por qué este cambio tan repentino? ¿Es tan jodidamente bueno este juego?
¿Estaba yo tan equivocado en su día?
EL “ALGO”
Pues mirad, no tengo ni idea. Si me preguntas si Destiny es
un mal juego te digo que no. Si me preguntas si es un juegazo, tampoco puedo
decirte que sí. Pero tiene “algo”. ¡Ay, ese “algo”, señores! Mira que
llevaba tiempo yo sin usar ese “algo” en una review. Destiny tiene defectos
nada más empezar por culpa de esa dichosa conexión obligatoria. ¡Pero vamos a
ver! Ni que todos tuviésemos Wifi en cada vivienda o en cada jodida habitación.
Para jugar Online no te digo yo que sea algo lógico, pero si un día, por
avatares de James Cameron de la vida, no me apetece jugar Online porque no
tengo Wifi, porque mi padre está viendo una serie de forma “dudosamente legal”
o porque mi hermano esté jugando a otra cosa en su ordenador…¡¡¿¿¿¿NO PUEDO
JUGAR A DESTINY, BUNGIE!!!??? Pues no, parece que no.
Así que si quieres pillarte este juego ten en cuenta que
tienes que estar más conectado que un mando de Wii U a su cargador (mira que le
dura poco la batería al bicho), porque de lo contrario no podrás jugar como es
debido.
Dejando de lado impedimentos ajenos, la otra pregunta clave
es… ¿Destiny es un buen juego? A ver, sí y no. Destiny tiene una campaña que viene a ser lo más
parecido a un chiste de Chiquito de la Calzada en un videojuego: La cosa va
avanzando, tú no te enteras ni de la mitad pero sigues jugando, a la mitad hay
un giro que dices “eh eh eh, ya lo voy pillando”, pero es mentira porque la
cosa se acaba, tú no te has enterado de nada y por compromiso te ríes, porque
es Chiquito de la Bungie”. Así que si eres amante incondicional de una buena
campaña, no te esperes la Panacea ni la Cola de Fenix en este juego, porque
todo consiste en ir a un planeta, barrer la zona de enemigos, y a otra cosa
mariposa. Pero entonces… ¿dónde demonios está la gracia? Pues, amigo mío, en
eso que soléis llamar “farmeo”.
Y es que la clave está en que la Campaña de Destiny, su
historia, no es la que se narra en cinemáticas o en misiones. La Historia está
en tu Guardián, en tu nivel, en ser el mejor. Si, ya, a ver, la premisa tiene
todas las papeletas para ser un argumento de Pokemon, pero la cosa es adictiva.
Cada misión, cada combate contra un enemigo, tiene su recompensa. Experiencia,
objetos, armaduras, contratos cumplidos con distintas facciones…el caso es que
en Destiny todo se repite, pero esa repetición mola, más que nada porque tienes
la sensación de que lo que estás haciendo va a repercutir en que los demás te
admiren. Cumplir 20 contratos te dará un arma, que te subirá tu Luz y…espera…no
os estáis enterando de nada, ¿verdad?
Claro, yo aquí hablando como si fueseis expertos en el juego y en
realidad no tenéis por qué saber nada.
EL ETERNO BUCLE DE LA
ADICCIÓN
Sentaros, porque voy a resumiros, así a bote pronto, un día
en Destiny. Te conectas y vas a la Torre, la zona social dónde se reúnen todos
los jugadores a modo de World Of
Warcraft. En esta Torre tenemos varias cosas que recoger, pero pocas que hacer.
Aquí juramos lealtad a alguna facción, cada cual con sus armas y recompensas
propias, aquí cogemos contratos que luego cumpliremos o en la campaña (mata a X
enemigos sin morir, o con X arma…) o en el modo Online/Crisol (Juega a X modo,
mata a tantos enemigos con X arma…otra vez, si…). Pues bien, llegas, pillas
contratos como si esto fuese el Real Madrid con sus entrenadores y sales a la
Órbita.
Ya en el espacio exterior, decides a dónde demonios quieres
ir. Teniendo en cuenta que hablo de la Edición Legendaria de este juego, hay
MUCHO donde elegir. Entiendo que la versión original del juego tenía menos
contenido que la Carta de Pablo Iglesias a los Reyes Magos, pero eso se ha
arreglado con las sucesivas expansiones. Ahora hay más planetas, más zonas, más
incursiones, más modos de Crisol…más de todo, vaya. La temática en la Campaña
sieeeeempre será la misma, y lo único que cambiará serán sus increíbles y
bellos escenarios, con un diseño artístico de los que quitan el hipo. En
Crisol, tenemos modos como Disputa (todos contra todos), Rescate (capturar una
sonda y defenderla), Grieta…paso de explicarlos porque para eso están los
manuales de instr… ¡mierda, que ya no hay manuales en las cajas! Bueno, pues
leed una review profesional, porque yo no voy a explicar tooooooodo el juego,
solo quiero transmitiros la sensación que yo tengo con el mismo.
Esta sensación se reduce a: la esencia en si misma del juego
es un bucle de repetición constante de cumplimiento de contratos para lograr
mejor equipo…pero esa esencia es reconfortante. De alguna manera, Bungie
siempre se las arregla para soltarte un nuevo objeto que te obliga a reestructurar
tu equipo, o te mete un nuevo evento que te mantiene pegado semanas al mando
gracias a sus jugosas recompensas (bendito Osiris), o carreras de motos (algo
sosas, todo hay que decirlo…). Destiny es una actividad constante y siempre
mantiene vivo su mundo gracias a su perfecta unión entre campaña y Online…aunque
he de ponerle una peguita a este. ¿Tenéis amigos?
CÓMPRATE UN AMIGO
La diferencia entre amar Destiny y aburrirse con Destiny es
simple: Tener amigos. Que si, mamá, que los amigos se hacen en la calle, muy
bien, pero también te vienen bien en Destiny. Las mejores cosas de este juego
te OBLIGAN a tener una escuadra, y una escuadra te obliga a tener amigos.
MUCHOS, joder. Una incursión, para que salga bien, requiere de 6 amigos que
puedan cuadras sus horarios para poder cumplir la misión. Esto, que de primeras
suena a defecto y hándicap, a la larga se convierte en la esencia de su
diversión. La comunicación por Micrófono resulta esencial, y las risas y momentazos
que se viven con los colegas en una incursión o en modos con tanta tensión como
Las Pruebas de Osiris no tienen precio. Ese es el “algo” del que os hablaba al
inicio. Yo entiendo y comprendo perfectamente a quien dice que Destiny es
repetivo. Lo es, sin duda, pero cuando yo me divierto no me importa que la
diversión sea repetida. Yo no le pido a Destiny lo mismo que le pido, por ejemplo,
a Metal Gear o a Halo. Destiny es, desde su mera concepción, un juego social,
un juego de amigos y entre amigos, y de este modo uno no piensa tanto en la repetitividad.
Podría llenar esta review de críticas a la campaña por su monotonía, su
historia y su narratividad, pero es que esta no busca ser protagonista, sino
contexto del juego, algo que sin duda puede chocar con los principios que
tenemos dentro del género.
DESCONEXÍON DE VIDA OBLIGATORIA
Así que…¡esta es la review! Si, venga, si ya lo sé, poco ha
tenido de review, pero es que la típica review de pormenorizar cada apartado
técnico ya empieza a aburrirme. Si fuese otro juego, lo haría sin duda, pero en
este me resulta difícil hacerlo. Porque vale, la banda sonora mola, está
doblado, la duración es eterna, los gráficos impresionan, la jugabilidad es
cómoda y variada según el personaje… ¡pero eso lo podéis leer en Hobbyconsolas
o cualquier otro medio! Yo solo escribo esto para deciros, hermanos, que pese a
los prejuicios que tengáis con este juego, tenéis que darle una oportunidad.
¡OJO!, sobre todo si tenéis amigos que lo tienen. Para una sola persona,
jugarlo solo, este juego es una basura, te aburrirás a las dos semanas y no
verás alicientes en continuar. Pero si tenéis amigos…ayyyyy, si tenéis dos o
tres amigos que lo tienen ya estáis tardando, porque una vez entras en su círculo
vicioso de “entro, pillo contrato, lo cumplo, me dan un arma mejor, la equipo,
la pruebo en crisol, me mola, la infundo, me dan otra, subo mi luz, veo a un
rival con el doble, me pico aaahhhh” NO PODRÁ SALIR.
Destiny te obliga a tener conexión obligatoria a Internet, y
yo lo critiqué y lo critico. Pero eso no era lo peor. Lo peor es que te obliga
a tener una desconexión de tu vida social para exprimirlo, y eso…eso me duele.
4/5